Jan Mayen, entre el mar de Noruega y el mar de Groenlandia

Jan Mayen es una pequeña isla volcánica de forma alargada de 377 km² situada en el océano Atlántico norte, en el límite con el océano glaciar Ártico, que está parcialmente cubierta por glaciares y dividida en dos partes por un estrecho istmo.

Su longitud es de 53´6 kilómetros y su anchura máxima es de 15´8 kilómetros. Está compuesta por dos partes geográficas unidas por un istmo de 2´5 kilómetros de ancho.

El punto más al norte de la isla es el Nordkapp (cabo Norte), formado durante la erupción del volcán Beerenberg en 1985, y el más al sur es el Sørkapp (cabo Sur). 

Es una isla solitaria que no forma parte de ningún archipiélago ni tiene cerca ninguna isla secundaria o islote. Se ubica al norte de Islandia, que se encuentra a 550 kilómetros al sudoeste, a 500 kilómetros de la costa oriental de Groenlanida y a 950 kilómetros al sudeste de Noruega y de las islas Svalbard al nordeste.

Delimita el mar de Groenlandia, inlucído en el océano Ártico, al noroeste, del mar de Noruega, incluído en el océano Atlántico, al sudoeste.

Por encima del paralelo 66° 33' 39" de latitud norte que marca el círculo Polar Ártico, se encuentra lejos de todas las rutas marítimas importantes.

El punto culminante de la isla es el volcán Beerenberg, también llamado Haakon VII Toppen, que se eleva hasta los 2.277 metros de altitud y que se encuentra y forma el Nord-Jan, el nordeste de la isla. 

Es el principal volcán de Jan Mayen y el más al norte de la Tierra. 

En su flanco noreste, en 1970 y 1985, las erupciones volcánicas provocaron el agrandamiento de la isla cuando las coladas de lava alcanzaron el mar.

El Beerenberg, está cubierto por 115 km² de hielo, casi un tercio de la isla. Esta capa de hielo, cuyas partes más bajas se funden durante los meses más cálidos, forman lenguas glaciares, de las cuales cinco alcanzan el mar.

El litorial está formado principalmente por acantilados y costas rocosas, y no posee ningún puerto o muelle. 

Las temperaturas son relativamente suaves teniendo en cuenta su latitud. Su clima es polar suavizado por la corriente del Atlántico norte que viene del sur, que es húmeda y provoca frecuentes tormentas y nieblas.

Las medias mensuales de temperaturas son de 4´9º C en agosto y de -6´1º C en febrero y marzo, con una media anual de -1´4º C.

Las temperaturas extremas registradas en la isla son de -28´4º C, en febrero de 1965 y de 18´1º C en junio de 1953). 

Las precipitaciones son relativamente escasas, con una media anual de 613 mm. 

En la isla ya no queda ningún mamífero terrestre desde inicios del siglo XX cuando los zorros polares fueron exterminados por los tramperos noruegos y los osos polares no van tan al sur debido a que los hielos polares disminuyen.

Si que anidan aves marinas con cerca de 500.000 parejas reproductoras, los animales más abundantes en la isla. En total, hay 120 especies de aves censadas.

Las aguas costeras son ricas en peces y atraen a diferentes ballenas, orcas, delfines y morsas.

La vegetación de la isla es la tundra, formada principalmente de hierbas y musgos. No hay bosques pero existe una especie de árbol en la isla, el sauce enano , con una altura comprendida entre 1 y 6 centímetros.

No existen registros sobre el descubrimiento de Jan Mayen y aún es motivo de controversia.

Es mas que probable que los vikingos conocieran la existencia de la isla ya que conocían el mar y los territorios circundantes, Noruega, las islas Feröe, Islandia, Groenlandia, pero no se ha encontrado ningún resto de asentamientos relacionados con ellos.

El monje irlandés Brendan de Clonfert relató en el siglo XVI que durante el transcurso de uno de sus viajes, se aproximó a una isla negra que escupía fuego y producía un ruido ensordecedor.

Brendan pensó que había llegado a las puertas del infierno y no desembarcó.

De todo este relato en realidad no existe ninguna prueba de ello ni de que se tratase de la isla de Jan Mayen, pero bien podría ser real el relato y que la descubriera durante alguna de las erupciones de sus volcanes.

La isla fue descubierta con certeza a inicios del siglo XVI por balleneros ingleses y holandeses que buscaban nuevas zonas de pesca. Debió de darse una gran polémica sobre el nombre y el mérito de otorgarse el descubrimiento.

Muchos navegantes reivindicaron su descubrimiento.  El navegante inglés Henry Hudson, que se habría aproximado la isla sin desembarcar en 1607 y la habría bautizado como Hudson's Tutches o Touches. En 1611 balleneros de Hull la llamaron Isla Trinidad. En 1612 Jean Vrolicq, un ballenero francés, la llamó Île de Richelieu.

Finalmente, la isla recibió su nombre por el explorador holandés Jan Jacobs May van Schellinckhout que visitó la isla en 1614. 

Su cartógrafo la bautizó como Jan Mayen después de cartografiar sus costas, constituyendo así la prueba más antigua e incontestable del descubrimiento de Jan Mayen.

Durante la primera mitad del siglo XVII, los balleneros establecieron en la isla varias fundiciones de aceite a partir de la grasa de ballena. Hasta mil balleneros llegaron a vivír entonces en Jan Mayen durante el periodo estival, en el momento álgido de la caza de la ballena. 

El aceite de ballena era muy codiciado en la época, por lo que se construyeron sistemas de defensa en la isla con cañones, con el fin de protegerla de los saqueos. 

En 1633 hubo un primer intento de pasar el invierno en la isla, pero fue suspendido. Siete hombres que quedaron en la isla, pero no sobrevivió ninguno.

La sobreexplotación de la ballena boreal hizo bajar su población en esta zona del océano Atlántico y como consecuencia la isla fue quedando poco a poco desierta entre 1640 y 1650.
Durante los siguientes 230 años permaneció deshabitada.

El invierno de 1882–1883 fue declarado primer año polar internacional y un equipo científico austro-húngaro escogió Jan Mayen como lugar de estudio, inaugurando la vocación científica que constituye la única actividad actual de la isla. 

Del 13 de julio de 1882 hasta el 6 de agosto de 1883, efectuaron numerosas investigaciones, mediciones de la salinidad y de la temperatura del mar, magnetismo, recolectas y una cartografía de la isla que fue utilizada hasta los años cincuenta. Pasaron el primer invierno sobre la isla con éxito.

A principios del siglo XX, los noruegos comenzaron a ir asiduamente a la isla y a pasar los inviernos con el fin de practicar la caza. 

Las presas favoritas eran el zorro polar, muy apreciado por su piel y también el oso polar. La caza intensiva redujo de manera drástica las  especies hasta su extinción, lo que redujo a su vez los beneficios generados por esta actividad. Este factor junto a las duras condiciones de vida hizo que los cazadores noruegos abandonaron la isla a finales de los años veinte.

En 1914, el profesor Kristian Birkeland de Oslo reclamó la construcción de una estación meteorológica en Jan Mayen ya que se necesitaba para conocer las perturbaciones atmosféricas provenientes de Groenlandia y el polo norte que se dirigíán hacia Noruega.

A pesar de la muerte de 125 cazadores de focas en dos tormentas producidas en 1917 y 1920, en verano de 1921 fue construida la estación meteorológica, situada en la costa sur de la isla.

El año siguiente, el instituto meteorológico noruego se anexionó la isla en  nombre del reino de Noruega con el fin de reforzar su presencia.

La soberanía noruega sobre Jan Mayen no ha tenido interrupciones posteriores a 1921, ni durante la Segunda Guerra Mundial. 

Los alemanes invadieron y ocuparon casi la totalidad de Noruega a partir del 9 de abril de 1940 pero no la isla, adonde los noruegos enviaron en 1941 un contingente militar compuesto de algunos soldados y un nuevo equipo científico con el fin de instalar una presencia capaz de responder a las tentativas de invasión alemanas. 

En 1943, los norteamericanos fueron autorizados para construir una estación de radionavegación en la isla.

Jan Mayen administrativamente es una parte integrante de Noruega, no se considera una dependencia con un estatuto especial. 

Desde 1995, ha sido administrada por el gobernador de la provincia de Nordland que está más cercana a ella, sin embargo parte de la autoridad ha sido delegada a un comandante de estación del servicio noruego de logística de defensa, una rama de las fuerzas armadas.

La isla está habitada por personal que opera una base de radio de alto alcance con un total de 14 empleados y una estación de servicios climatológicos con 4 personas.

Tiene una pista de aterrizaje sin pavimentar y no tiene puertos, solo anclajes en alta mar.

La isla no tiene recursos naturales explotables pero existen importantes recursos pesqueros fuera de la isla ya que se establece una gran zona económica exclusiva en torno a ella. 

Una disputa entre Noruega y Dinamarca en relación con la zona de exclusión de pesca entre Jan Mayen y Groenlandia, se liquidó en 1988 con la concesión  a Dinamarca de la mayor área de la soberanía sobre la zona.