Los diez días

Históricamente a la Iglesia Católica se la acusó de muchas cosas, pero la más original de todas las acusaciones nace en la edad media cuando la gente creyó erróneamente que la Iglesia les había robado parte del tiempo de sus vidas.


Dada la diferencia entre el año solar y el año lunar, existió desde siempre en las civilizaciones que utilizan estos astros como referencia, un problema de desincronización entre las estaciones y el calendario.
Ya los Romanos debían introducir cada tanto un mes intercalado para resincronizar el desfase de tiempo que producían éstos días de menos en el año lunar con respecto al solar.
Sin embargo, la mala implementación de estos días compensatorios llevó a que las estaciones del año y los meses del calendario no concordaran en lo más mínimo, obligando a Julio César a encomendarle la tarea de diseñar un nuevo calendario a un astrónomo griego.
Así nace el calendario Juliano que es la base del que usamos hoy en día, un calendario solar que establecía la duración del año en 365,25 días y contenía meses de 30 y 31 días, excepto febrero que tenía 28 días y 29 en los años bisiestos.
De todas maneras, e incluso con las modificaciones y mejoras del nuevo calendario, el tiempo seguía desincronizándose constantemente con respecto a las estaciones del año ya que el astrónomo encargado de calcular la duración del año se pasó 11 minutos y 14 segundos.




En aquel momento, el error no tuvo ninguna importancia, pero a mediados del siglo XVI el calendario llevaba 10 días de adelanto a las estaciones. 
En 1582 el papa Gregorio XIII (1502-1585) mandó revisar el calendario, se descubrió el error y encomendó crear uno nuevo que pasó a ser conocido como calendario gregoriano, y ese año se suprimieron los días comprendidos entre el 5 y el 15 de octubre que corregía los errores que llevaban al desfase temporal en el calendario juliano. 
La idea de quitar diez días al año en curso fue por hacer coincidir al 21 de Marzo del siguiente año con el equinoccio de primavera y de ahí la razón de que el 4 de octubre de 1582 fuese el último día del calendario juliano y el siguiente el día 15 de Octubre el primero del gregoriano.


La población, en su gran mayoría granjeros y gente de pensamiento rústico, no comprendió que esto era sólo un ajuste y, de hecho, pensó que la Iglesia les había robado 10 días de su vida, razón suficiente para que una explosión de ira y terror asaltara los poblados de toda Europa y de las partes que aceptaron de primera el ajuste varios paises lo rechazaron.
La gente comenzó a salir a las calles y rebelarse exigiendo la devolución del tiempo robado, incluso bajo la amenaza de revelarse contra sus líderes.


Un ejemplo de este salto al futuro fue Teresa de Jesus, que murió el 4 de Octubre de 1582 y fue enterrada el día 15 del mismo mes, aunque en realidad era el día siguiente.


También tenemos el ejemplo de Cervantes y Shakespeare. Cervantes murió, oficialmente, el 23 de Abril de 1616 del calendario gregoriano, que ya regía en España. Shakespeare también lo hizo, en efecto, el 23 de Abril del calendario juliano (3 de mayo en el gregoriano), vigente todavía en Inglaterra. Es decir, diez días más tarde, que como coincidencia no deja de ser notable.

1 comentario:

  1. Estos calendarios hechos poe seres humanos(el romano, el juliano y el gregoriano), qué relación tienen con el verdadero calendario establecido por Dios en el Libro de Génesis 1:14, o sea el calendario Luni-Solar? Este último fue el calendario que guardaron Adán y Eva desde la creación del mundo, también,el Señor Jesucristo y los cristianos primitivos y algunos hebreos hasta el dia de hoy. Si un DÍA corresponde a un giro de la tierra por sí misma, un MES, corresponde al giro de la luna alrededor de la tierra y un AÑO, al desplazamiento de la tierra alrededor del sol, entonces, una SEMANA de 7 días a qué movimiento corresponde ? La Biblia es la única que trae la respuesta.

    ResponderEliminar